Comprando un electrico usado?

Comprar un vehículo eléctrico usado es emocionante, pero es crucial evaluar el estado de la batería, ya que es uno de los componentes más costosos y críticos. Aquí hay algunos consejos para determinar el estado de la batería de un vehículo eléctrico usado:

1. Rango de Conducción:

Verifica el rango de conducción que ofrece el vehículo en su estado actual. Un rango menor al especificado por el fabricante puede ser indicativo de una capacidad reducida de la batería.

2. Historial de Carga:

Solicita el historial de carga del vehículo. Puedes revisar cuántas veces ha sido cargado y descargado, así como la forma en que se ha llevado a cabo la carga (rápida o lenta). Cargas frecuentes a altas velocidades pueden afectar la vida útil de la batería.

3. Edad de la Batería:

Determina la edad de la batería. Las baterías de iones de litio, comunes en los vehículos eléctricos, tienden a degradarse con el tiempo. Si la batería tiene varios años de antigüedad, es posible que haya experimentado cierta pérdida de capacidad.

4. Garantía de la Batería:

Revisa si la batería aún está bajo garantía. Algunos fabricantes ofrecen garantías específicas para las baterías, y si la garantía aún está vigente, esto podría proporcionar tranquilidad en caso de problemas futuros.

5. Informe del Estado de la Batería:

Algunos vehículos eléctricos proporcionan informes detallados sobre el estado de la batería. Estos informes suelen ofrecer información sobre la capacidad actual, la salud general y cualquier indicio de problemas.

6. Prueba de Rendimiento:

Si es posible, realiza una prueba de rendimiento de la batería. Esto puede incluir verificar la capacidad de carga y descarga, así como la velocidad de carga. Algunos concesionarios o especialistas en vehículos eléctricos pueden realizar estas pruebas.

7. Inspección Visual:

Realiza una inspección visual de la batería para detectar posibles daños físicos. Aunque las baterías de iones de litio son robustas, cualquier evidencia de impactos o maltrato podría afectar su rendimiento.

8. Condiciones Ambientales:

Ten en cuenta las condiciones ambientales en las que el vehículo ha estado operando. Las altas temperaturas y las condiciones extremas pueden acelerar la degradación de la batería.

9. Condiciones de Almacenamiento:

La forma en que el vehículo ha sido almacenado cuando no estaba en uso también es importante. Las baterías se benefician de un almacenamiento en condiciones frescas y moderadas.

10. Asesoramiento Profesional:

En caso de duda, busca la ayuda de un técnico especializado en vehículos eléctricos. Pueden realizar pruebas más avanzadas y proporcionar una evaluación más detallada del estado de la batería.

Recuerda que una batería puede degradarse con el tiempo, pero eso no significa necesariamente que sea un mal negocio. La clave es entender su estado actual y evaluar si se ajusta a tus necesidades y expectativas.

Amortiguadores, con los pies (llantas) siempre sobre la tierra.

Los amortiguadores son componentes fundamentales en la dinámica de un automóvil, desempeñando un papel crucial tanto en la seguridad como en el confort del conductor y los pasajeros. Estos dispositivos forman parte del sistema de suspensión, trabajando en conjunto con otros elementos para mantener la estabilidad del vehículo y absorber impactos que podrían afectar la conducción.

Una de las funciones más importantes de estos componentes, también conocidos como shock absorbers, es la de controlar el movimiento de la suspensión, evitando que las ruedas presenten un movimiento de rebote excesivo y así poder proporcionar una marcha de conducción más suave y sobre todo seguro.

En términos de seguridad, los amortiguadores contribuyen a mantener las ruedas en contacto constante con la carretera, mejorando la tracción y evitando el deslizamiento. Además, juegan un papel crucial en la estabilidad del vehículo durante maniobras bruscas. En cuanto al confort, reducen las vibraciones y oscilaciones, garantizando una experiencia de conducción más placentera.

Sus características

Los amortiguadores están construidos como un cilindro lleno de un fluido especial, generalmente aceite, y cuentan con un pistón que se mueve hacia arriba y hacia abajo dentro de este cilindro.

Existen varios tipos de amortiguadores, pero los dos más comunes en los vehículos que ruedan en las calles son los amortiguadores hidráulicos y los amortiguadores de gas. Los hidráulicos utilizan el principio de pasar el fluido a través de pequeños orificios para generar resistencia, en tanto que los amortiguadores de gas incorporan nitrógeno para proporcionar una respuesta más rápida y eficiente.

El funcionamiento idóneo de los amortiguadores pasa siempre por un mantenimiento preventivo adecuado y poder detectar signos de alerta que indiquen que puede presentarse un problema con la operación de este componente. Entre estos signos se incluyen la inclinación excesiva del vehículo al girar, un manejo irregular, vibraciones excesivas y ruidos anormales como golpeteos o chirridos.

Con el objetivo de poder anticiparse a estos potenciales problemas en uno o varios de los amortiguadores es recomendable realizar inspecciones regulares, verificar la presencia de fugas de fluido, asegurarse de que los amortiguadores estén correctamente sujetos y reemplazarlos si muestran signos evidentes de desgaste. Hoy en dia existen equipos para determinar con toda exactitud el estado de ellos.

Dos recomendaciones a propósito del momento en que sea necesario reemplazarlos. Primero, nunca se deben reparar, los amortiguadores una vez fallan deben ser cambiados por una pieza nueva de un proveedore que ofrezca garantía e idoneidad. Y como segunda medida, el cambio debe hacerse evaluando el comportamiento del nuevo contra el usado en el mismo eje. Esto se hace con equipos especiales y evita el cambio inoficiosos de un amortiguador que pudiese tener vida util remanente.

Nuestros equipos en Autotest, permiten un preciso diagnostico del comportamiento de la suspension y los amortiguadores.

La caja CVT, así funciona.

imagen: https://www.klipartz.com/

Aunque todavía no son la mayor parte del mercado automotor, por lo menos en Colombia, las cajas automáticas sí han generado  un posicionamiento cada vez mayor como una opción viable para los potenciales compradores de un automóvil.


El hecho de poder dejar la gestión de los cambios a un sistema  automático sin tener que preocuparse por estar cada momento presionando el pedal de embrague  y manipulando la palanca selectora de las marchas, especialmente en situaciones de tráfico denso o en ascensos pronunciados, es una ventaja que muchos conductores destacan.

Y dentro del universo de cajas automáticas que los fabricantes montan en sus autos, hay un sistema que en los últimos años ha ganado posicionamiento como alternativa para el sistema de caja y motor. Se trata de la caja automática tipo CVT    

La caja de cambios CVT (por sus siglas en inglés, y que traducirían algo como Transmisión Variable Continua) es un tipo de caja de cambios automática que permite una aceleración más suave y una mejor eficiencia de combustible en comparación con las cajas de cambios automáticas tradicionales.

En lugar de tener un número fijo de relaciones de cambio como una transmisión automática convencional, una caja CVT utiliza una banda o correa, o también una cadena, y dos poleas variables para proporcionar una relación de transmisión continua. Una polea es conducida por el motor, mientras que la otra polea está conectada a la transmisión.

Estas dos poleas se mueven hacia adentro y hacia afuera para cambiar la relación de transmisión. Cada polea tiene dos piezas, una de las cuales es móvil y la otra fija. La banda o cadena de metal se envuelve alrededor de ambas poleas, y la posición relativa de las dos piezas móviles determina la relación de transmisión.

A medida que la velocidad del motor aumenta, la polea motriz se contrae y la polea de transmisión se expande, lo que cambia la relación de transmisión. De esta manera, la caja CVT puede proporcionar una relación de transmisión continua y variable que se adapta a la carga del motor y las condiciones de la carretera.

La caja CVT también tiene la capacidad de mantener el motor en su punto de operación más eficiente, lo que puede mejorar la eficiencia de combustible en comparación con las cajas de cambios automáticas tradicionales.

Ventajas de la caja de cambios CVT:

1.            Eficiencia energética: La caja de cambios CVT puede mantener el motor funcionando a su mejor velocidad en todo momento, lo que puede mejorar la eficiencia energética y reducir el consumo de combustible del vehículo.

2.            Aceleración suave: Debido a que no hay cambios bruscos en la relación de transmisión, la CVT ofrece una aceleración suave y constante que puede mejorar la comodidad de conducción.

3.            Tamaño compacto: La CVT es más ligera y compacta que una caja de cambios automática convencional, lo que puede ahorrar espacio en el compartimento del motor y mejorar el rendimiento del vehículo.

4.            Mayor durabilidad: La CVT tiene menos piezas móviles que una caja de cambios automática convencional, lo que puede reducir la necesidad de mantenimiento y prolongar la vida útil de la transmisión.

Desventajas de la caja de cambios CVT:

1.            Sensación de conducción diferente: Algunos conductores pueden encontrar que la sensación de conducción de la CVT es diferente a la de una caja de cambios automática convencional, ya que no hay cambios bruscos en la relación de transmisión.

2.            Ruido: La CVT a menudo produce un zumbido o ruido de alta frecuencia cuando el motor está funcionando a altas revoluciones, lo que puede ser molesto para algunos conductores.

3.            Menor capacidad de carga: La CVT puede tener una capacidad de carga limitada en comparación con una caja de cambios automática convencional, lo que puede ser una consideración importante para los conductores que necesitan remolcar cargas pesadas.

4.            Mayor costo: La CVT puede ser más costosa de producir y reparar que una caja de cambios automática convencional, lo que puede resultar en un mayor costo de propiedad a largo plazo.

Los carros ahora tienen más de computadora.

Los vehículos modernos suelen tener varias computadoras, conocidas como Unidades de Control Electrónico (ECU), por sus siglas en inglés), que se encargan de monitorear y controlar diversos sistemas del vehículo.

Estas ECUs utilizan sensores para recopilar datos en tiempo real sobre el funcionamiento del vehículo y, a través de algoritmos y software especializado, procesan estos datos para tomar decisiones en milisegundos y controlar el sistema correspondiente.

El número exacto de ECUs puede variar dependiendo del modelo y la marca del vehículo, pero en general se pueden encontrar entre 30 y 100 unidades electrónicas en un automóvil moderno. Cada ECU está diseñada para controlar un sistema específico, como el motor, la transmisión, los frenos, la dirección, el aire acondicionado, el sistema de sonido, los airbags, entre otros.

Algunas de estas computadoras incluyen:

Unidad de control del motor (ECU): Controla y monitorea el rendimiento del motor, la transmisión y el sistema de combustible.

Unidad de control de frenos (BCU): Controla y monitorea el sistema de frenos, incluyendo el ABS (sistema de frenos antibloqueo) y el ESP (programa electrónico de estabilidad).

Unidad de control de carrocería (BC): Controla y monitorea los sistemas eléctricos y electrónicos de la carrocería, como las luces, los seguros de las puertas, las ventanas eléctricas y el sistema de aire acondicionado.

Unidad de control de la transmisión (TCU): Controla y monitorea el rendimiento de la transmisión automática.

Unidad de control de la suspensión (SCU): Controla y monitorea el sistema de suspensión, incluyendo la altura de la carrocería y la amortiguación activa.

Si bien la introducción de la tecnología informática y de telecomunicaciones en los autos ha traído una importante evolución en aspectos como la seguridad, el desempeño y el confort a bordo; también es un factor que lleva una alta exigencia en los cuidados y mantenimientos preventivos del carro, porque no cualquier persona puede atender los requerimientos de servicio y/o reparación. El personal de posventa se vuelve cada vez más especializado con conocimientos más específicos en aspectos como electrónica.

Por eso, tener un carro con esta gran variedad de elementos también exige que al momento de llevarlo a revisiones se haga solo sitios especializados y de alto reconocimiento por su calidad e idoneidad.

La caja automática dura si tiene un buen mantenimiento.

El mantenimiento preventivo de la caja automática de un automóvil puede ayudar a prolongar la vida útil y el rendimiento de la transmisión. A continuación, aquí en Autotest, les ofrecemos  algunas recomendaciones sobre los de los mantenimientos preventivos que se pueden realizar:

1.            Cambio de aceite: El cambio de aceite de la caja automática es uno de los mantenimientos más importantes. Se recomienda realizarlo cada 60,000 kilómetros o según las recomendaciones del fabricante del automóvil. El aceite de la transmisión debe estar en buen estado para lubricar las piezas y evitar el desgaste prematuro.

2.            Revisión de fugas: Las fugas de aceite de la caja automática pueden ser un problema importante. Se debe revisar periódicamente si hay fugas en las juntas o sellos de la transmisión para evitar que el nivel de aceite baje y dañe las piezas internas.

3.            Inspección de filtros: Los filtros de la caja automática deben ser inspeccionados y reemplazados si es necesario durante el cambio de aceite. Los filtros sucios pueden impedir el flujo de aceite a través de la transmisión, lo que puede provocar un desgaste prematuro de las piezas internas.

4.            Revisión de niveles: Es importante revisar el nivel de aceite de la caja automática regularmente para asegurarse de que no haya fugas y que haya suficiente aceite en la transmisión.

5.            Inspección de la correa: Si el automóvil tiene una caja automática con correa, se debe inspeccionar regularmente para asegurarse de que esté en buen estado. Una correa desgastada o dañada puede provocar una falla en la transmisión.

6.            Mantenimiento general: Además de los mantenimientos anteriores, también se recomienda realizar un mantenimiento general de la caja automática, que incluye la revisión de los soportes, palancas y otras piezas mecánicas.

Es importante recordar que el mantenimiento preventivo regular de la caja automática puede ayudar a evitar costosas reparaciones y prolongar la vida útil de la transmisión.