DEJANDO UN VEHICULO USADO EN UN CONCESIONARIO?

Se ha puesto muy de moda, entregar su vehiculo usado a cambio de uno nuevo en los concesionarios, y asi evitarse los engorrosos problemas que ocasiona el intentar venderlo por fuera, permitiendo ademas, tener la platica junta para poder si ordenar el nuevo sin mucha espera.  Sin embargo es importante saber muy bien a que se atiene cuando se decide por esta opcion:

En muchos casos, empresas serias, recurren a  empresas como la nuestra, enviando los vehiculos y permitiendo que se realice una revision a fondo que sirve de base para una negociacion equilibrada.

Algunos otros han optado por tener en sus instalaciones, la posibilidad de hacer la revision con la supuesta «comodidad»  para el Cliente que esto implica; permitiendole rapidamente conocer su estado y asi fijar el famoso precio de Retoma.  Nuestra opinion es que esta es una opcion injusta para el cliente.  Es obvio que dicha revision siempre estara a favor del dueño del aviso y todo lo que en ella se escriba tendera a maximisar la ganancia de quien lo esta retomando, incluyendo en el informe protecciones, observaciones y daños que finalmente resultan afectando el precio del propietario que lo unico que tiene que hacer es aceptarlo sin discusiones.

Nuestra recomendacion es, si va dejar su vehiculo en un concesionario, NO ACEPTE LA REVISION REALIZADA EN SUS INSTALACIONES. Solicite que sea enviado el vehiculo a un tercero independiente, con suficiente experiencia, equipos y reconocimiento que le entreguen y expliquen AL PROPIETARIO, el real estado del vehiculo, y asi con informe en mano pueda sentarse a «negociar»  cuanto realmente es la retoma de su carro.

NO COMA CUENTO.

AUTOTEST S.A.,  se especializa en acompañar a sus clientes en este proceso.  Si tiene alguna duda, visitenos aqui se la resolvemos.

COMPRANDO CARRO? PRUEBELO COMO UN PROFESIONAL.

La mejor forma de comparar vehículos es con una prueba de conducción y para ello lo mejor es llenarse de cabeza fría, hacer muchas preguntas y dejar la timidez en la casa.

El primer paso en ese proceso es programar todo aquello que va a evaluar, ojalá sea por escrito, para que a la hora de la verdad no olvide nada por la emoción de montarse en un carro nuevo.

Luego, tenga claridad sobre el tipo de vehículo que está evaluando.

No es lo mismo un auto familiar que una camioneta, o un sedán que un coupé o una pick up que una van.

Todos ellos son distintos, cumplen una función diferente y el fabricante ha buscado con su esfuerzo diferenciarlos de sus competidores.

No es lo mismo comparar naranjas con manzanas y el comportamiento de la conducción del carro o su confort están determinados por el tipo de carro. A su medida

Antes de iniciar la prueba abra todas las puertas y la maleta. Imagínese en el supermercado empacando todas las bolsas y guardando todas sus compras.

También piense si puede transportar esa bicicleta que cada ocho días le lleva al niño al paseo. Busque la llanta de repuesto y analice si es fácil de retirar. Luego siéntese en todas las sillas, adelante y atrás… ¿Son cómodas, demasiado duras o muy blandas? ¿Cabrían tres personas atrás cómodamente o solamente dos niños y estrechos? ¿Qué tanto espacio le queda en las piernas o debajo de las sillas para sus pies?

Luego siéntese en la silla del conductor. Realice todos los ajustes posibles a la silla.

¿Se siente cómodo? Ahora ajuste los retrovisores y el timón ¿Cómo se siente viendo los instrumentos, mirando hacia atrás, manejando el timón o haciendo los cambios?

Accione el aire acondicionado, la calefacción, el radio ¿Le parece todo bien o encuentra algo que le molesta o no está en su debido lugar?

Ahora mire al exterior ¿Ve todas las esquinas del carro? ¿O tiene puntos ciegos o difíciles de ubicar?

En ese momento, prepárese para una prueba de ruta.

La prueba de ruta

Lo primero es apagar el radio y estar dispuesto a oír hasta el mínimo ruido. Luego escoja una ruta que le sea familiar, con diferentes condiciones para que pueda conocer al máximo el auto y pídale al vendedor que lo acompaña, que le diga cuales son las mejores cualidades del auto según su criterio. Esté preparado para conocerlas.

Converse poco y escuche mucho. Concéntrese en la facilidad de conducción y en la comodidad en el asiento, en la posición de los pedales; fíjese si son suaves o necesitan fuerza como una maquina de un gimnasio.

Es muy importante tener un auto que sea confortable y no difícil como un Fórmula 1.

En la ruta, ¿Cómo se comporta el carro

¿La dirección es predecible y precisa o demasiado pesada y con mucho juego?.

Espere un poco de espacio adelante y acelere a fondo. ¿Cómo fue el desempeño? ¿Hizo mucho ruido el motor (como un carro de carreras) o apenas dejo sentir un leve ronroneo?

¿Aceleró como un deportivo o apenas se sintieron los caballos como ponys de la cortina de hierro?

Luego, en un área más segura, por ejemplo un parqueadero, frene a fondo varias veces ¿Qué pasó con el freno? ¿Cambió de comportamiento a medida que se calentó? ¿Produjo ruidos extraños o desviaciones hacia un lado o otro?

Si está equipado con sistema ABS, ¿cómo fue el funcionamiento? ¿Realmente sintió el efecto de este último en un aumento de la maniobrabilidad durante el frenado?

Luego haga un giro de 360 grados a cada lado ¿Le parece confortable el radio de giro o requiere de un gran espacio para dar una vuelta en U? ¿Chillan las ruedas o funcionan como si estuviera montado en los mejores tenis deportivos?

Si encuentra en su camino un terreno destapado o con huecos, escuche ruidos extraños que indiquen una suspensión inapropiada para las calles o carreteras del país.

Estacione y mire las características de expansión del vehículo. Algunos, por ejemplo, ofrecen que las sillas traseras se retraen y aumentan la capacidad de carga ¿Es esto cierto? o sólo se doblan de forma parcial y en realidad el beneficio es poco.

Otros ofrecen una tercera fila de sillas que se pueden remover, ¿es fácil hacerlo o requiere llamar a Supermán para que recurra en su ayuda?.

Ahora sí devuélvase al concesionario y decida si la prueba fue superada con creces.

Antes de firmar el pedido, solicite una prueba de noche.

Tal vez pueda llevar el vehículo a su casa y medirlo en el parqueadero. En el camino ensaye las luces, las exploradoras y, en general, la visibilidad con bajos niveles de iluminación.

El resto, unos lo odian y otros lo aman. Si está seguro, satisfecho, negocie el precio sin miedo, siempre habrá algo para obtener. No sienta pena ni compromiso por no comprar el vehículo de inmediato.

Es probable que quiera o deba evaluar otro vehículo.

Esto le dará más seguridad en la compra y le permitirá escoger con mayor propiedad y conocimiento.

Ahora si, adelante y buena suerte con su compra

AFINACION A UN VEHICULO CON GAS NATURAL?

«Quisiera conocer, con relación a la afinación o puesta a punto de los motores, si existe en la ciudad de Medellín alguna serviteca o establecimiento con idoneidad comprobada donde un propietario de vehículo con motor carburado o de inyección, pueda llevarlo para hacerle la afinación a gasolina y la puesta a punto o calibración a gas en la misma serviteca y por un mismo mecánico experto.

He preguntado la razón por las cuales, el mismo taller, no tiene un mecánico que sea experto en la afinación de los dos sistemas -Gas y gasolina- y le den al propietario que paga por ello, garantía de un buen funcionamiento en los dos sistemas».

La respuesta :

Efectivamente, hoy en día es un verdadero problema realizar la afinación o puesta a punto de un motor convertido a GNV.

La razón fundamental es que todos los mantenimientos de los sistemas de gas deben ser hechos en los centros autorizados para ello y ojalá en el centro que realizó la conversión. De manera lamentable y visto desde la óptica de la operación en gasolina, cada día los ajustes y procesos para poner a punto un motor, son más complejos y propios de cada marca, lo que requiere, en algunos casos, herramientas, repuestos y equipos exclusivos de los concesionarios. La conclusión entonces es que estas operaciones deben ser realizadas en puntos de servicio distintos.

Luego de consultar con algunos distribuidores e instaladores de equipos a gas sobre esta dificultad encuentro que tienen un concepto técnico que podría, de alguna forma, ofrecer una solución.

Afirman, que un buen equipo de GNV, no debe afectar la operación a gasolina. Técnicamente, para que un vehículo opere de forma eficiente con gas, debe tener unas especificaciones de afinación distintas a la operación con gasolina, en especial lo que hace referencia al avance de la chispa de encendido, que para el caso del gas requiere un mayor adelanto. Esto se logra con aditamentos instalados con el equipo, que entran a operar tan pronto se hace el cambio de un combustible a otro.

Sin embargo, por daños en estos sistemas o por no instalarlos en el momento de la conversión, los mecánicos hacen los ajustes del gas sobre los sistemas de gasolina o viceversa. Y, obviamente, cuando se va de un taller a otro, cada uno hace los ajustes que requiere para su propia operación con las consecuencias que usted menciona.

En la actualidad, los equipos de gas ofrecidos son de tecnología muy avanzada y dentro de sus características principales se encuentra un sistema de control (computador) propio e independiente del que regula el sistema de gasolina y un sistema de inyectores también independiente, colocado en el múltiple de inyección que, cuando se opera con gasolina, es como si no existiera. Esto garantiza la operación de cada uno de forma independiente y la independencia en los ajustes requeridos a cada uno.

Para todos los casos, mi recomendación es realizar primero la afinación de gasolina e insistir con ella hasta que el vehículo este funcionando de forma correcta. Posteriormente, asistir al centro de conversión a gas y realizar la afinación propia de este sistema, exigiendo que se mantengan las condiciones correctas de la operación a gasolina y que se optimice la operación del vehículo con gas. Es probable que si el sistema está montado y opera correctamente los ajustes sean mínimos y los cambios en repuestos solo correspondan al equipo de gas.

RUIDOS AL FRENAR EN REVERSA..

 

Tengo un Renault. El problemas es que después de unos kilómetros de recorrido, si requiero darle marcha atrás al frenar por primera vez se siente un golpe fuerte en el tren delantero, si repito el frenado de nuevo se repite el golpe pero con una menor intensidad. 

He consultado al concesionario sobre este problema en mi vehículo ya que todavía cuento con la garantía, pero la respuesta es que no encuentran ningún defecto en el sistema de frenado ni en la suspensión delantera del vehículo. ¿Cuál puede ser la causa para que se presente esta situación?

El ruido que el lector manifiesta es ocasionado por las pastas de frenos. Ellas van alojadas en las mordazas y para que puedan ajustar cuando se presiona el freno son flotantes dentro de ella.

Cuando el vehículo comienza a rodar hacia adelante ellas se ajustan en una dirección y cuando aplica reversa y se frena tienden a ajustarse en la posición contraria y por eso golpean contra la mordaza.

Es un fenómeno completamente normal y no debe causar preocupación.

COMPRESORES Y TURBOALIMENTADORES..


La potencia de un motor de combustión interna esta fundamentalmente ligada a su cilindrada, que en última instancia es el volumen de aire con que es capaz de llenar sus cilindros en el ciclo de la aspiración. Para esta cantidad de aire el sistema de combustible, sea de carburador o de inyección deberá introducir una cantidad precisa de gasolina, normalmente en proporción de 14 partes de aire por una de combustible. Quiere decir esto que no obtenemos ningún resultado positivo sobre la potencia si aumentamos la proporción de gasolina, pues la combustión esta regida por leyes físicas y químicas de absoluta precisión.

La única forma de mejorar la potencia es aumentar la cantidad de moléculas de aire que ingresan al motor y así poder añadir la correspondiente cantidad de combustible. Para ello se usan compresores, aparatos que toman aire a presión atmosférica del exterior y lo introducen al motor a mayor presión. Existen dos clases: los turboalimentadores y los supercargadores.

Su diferencia está en la forma como son accionados, pues para poder funcionar necesitan una fuerza externa que los haga mover. Los turboalimentadores son un juego de dos turbinas unidas por un eje. Una de ellas se usa para mover los gases que irán comprimidos al motor y la otra, que es movida por los gases del escape del mismo motor, es la que produce el esfuerzo necesario para hacer el trabajo. Se aprovecha la energía de los gases de escape para proporcionar aire comprimido al motor.

Los supercargadores son un sistema de compresión en forma de lóbulos accionados por movimiento mecánico tomado directamente del motor, en algunos casos por correas o bandas y en otros directamente por piñones. En este caso se aprovecha la energía del cigüeñal del motor para obtener el movimiento que se usa para la compresión del aire.

En ambos casos se usa, de manera adicional un elemento muy mencionado: el intercooler. La razón es que el aire al ser comprimido por el turbo o por el supercargador aumenta su temperatura y aunque aun así hay mayor cantidades moléculas de aire por volumen para ingresar al motor, si estuviese frío seria aún mejor. La solución es colocar un radiador a la salida de los gases comprimidos y extraerle ese calor para poder así bajar su temperatura. Esto se hace con un radiador o enfriador que funciona con aire exterior que pasa a través de el.

El uso de estos aparatos cada vez se hace mas generalizado pues además de mejorar la potencia de los motores de forma importante, hace que su funcionamiento no se afecte por la altura sobre el nivel del mar.