¿Al comprar que es mejor: potencia, torque o velocidad?.

imagen: kilpartz.com

Al momento de adquirir un automóvil, los potenciales nuevos propietarios del carro pueden enfrentar un dilema al intentar elegir el que será el nuevo carro, ¿qué será más conveniente, un carro potente, uno que sea veloz, o el que tenga el mejor torque?  Estas características son cruciales para el rendimiento general del vehículo, pero ¿cuál es realmente más importante? Desde Autotest explicamos de manera sencilla en qué consiste cada una de ellas y su importancia al evaluar el carro a comprar.

Potencia: hace referencia a la cantidad de trabajo que el motor puede realizar en un período de tiempo determinado. Se mide en caballos de fuerza (hp o cv). Cuanta más potencia tenga un vehículo, mayor será su capacidad para acelerar rápidamente y mantener altas velocidades. Es común pensar que un motor con más caballos de fuerza es mejor, pero esto no siempre es cierto.

Velocidad: la velocidad se refiere a la rapidez con la que un automóvil puede desplazarse en una dirección determinada. En Colombia y en general en los mercados de Latinoamérica  la velocidad máxima de un vehículo se indica en kilómetros por hora (km/h). Una alta velocidad máxima puede ser atractiva para aquellos que disfrutan de la emoción de la conducción a alta velocidad o para quienes planean viajar largas distancias en autopistas.

Torque: el torque es la fuerza de torsión que ejerce el motor y está relacionado con la capacidad de un automóvil para moverse desde una posición de reposo o para superar obstáculos como colinas o terrenos empinados. Se mide en libras-pie (lb-pie),  kilogramos-metro (kg-m)  o Newton metro (Nm). Un motor con un alto torque puede proporcionar una sensación de aceleración más rápida y una conducción más suave en situaciones cotidianas, como al adelantar a otro vehículo o salir de un semáforo.

¿Qué es más importante?

Para saber eso es importante conocer el uso que tendrá el automóvil, claro, también entran en juego un poco las preferencias personales para una decisión racional:

1.            Uso diario y comodidad: si se va  a utilizar el vehículo básicamente para desplazamientos diarios, un motor con un buen torque en rangos de revoluciones bajos y medios puede ser más útil y cómodo. Esto permite una aceleración ágil en el tráfico y una conducción suave.

2.            Emoción al volante: si definitivamente el objetivo es  un desempeño máximo, la velocidad, la potencia y la velocidad máxima serán los aspectos más relevantes. Un motor con estas características brinda una sensación de potencia en carreteras abiertas y permite disfrutar de una conducción más deportiva.

3.            Tareas específicas: si se trata de un carro especialmente para el trabajo, como llevar carga en su volcó o remolcar cargas pesadas, el torque es esencial para proporcionar la fuerza necesaria para superar esas situaciones de carga.

4.            Eficiencia de combustible: si el objetivo es la economía de combustible y un carro con un desempeño eficiente en términos de consumo, es recomendable buscar un equilibrio entre potencia, velocidad y torque para obtener el mejor rendimiento posible.

El equilibrio ideal

En general, lo más importante es encontrar un equilibrio adecuado entre potencia, velocidad y torque que se adapte a sus necesidades y estilo de conducción. Los fabricantes de automóviles han estado trabajando en la optimización de estos aspectos para brindar vehículos más equilibrados y eficientes.

Es esencial tener en cuenta que el diseño general del automóvil, la aerodinámica, el peso y otros factores también influyen en su rendimiento. Por lo tanto, antes de tomar una decisión, es recomendable realizar un recorrido de prueba para experimentar cómo se comporta el vehículo en situaciones del mundo real.