AUTOMOVILES ANTIGUOS
Uno de los eventos que quizás atraen la mayor cantidad de público durante los festejos de la Feria de las Flores de Medellín, es el ya tradicional Desfile de Autos Clásicos y Antiguos, todo un museo rodante de la historia del automóvil mundial y local. Esta reunión de selectos vehículos, cuyo estado de conservación o restauración se puede admirar en cada una de sus partes y componentes, deja a la audiencia extasiada con semejante película en vivo y en directo del pasado automotriz que muchos vivieron, recuerdan o escucharon. Un tesoro incalculable, no porque sean imposibles de avaluar los vehículos exhibidos, sino por todo el esfuerzo, la historia y el valor cultural y sentimental que ellos representan.
Pero a muchos les ha surgido el interrogante sobre vehículos que se ven bastante recientes o que aún se les ve con frecuencia en las calles y que en nuestro imaginario no tienen el aspecto de piezas de museo. Pues bien, debemos diferenciar los términos de “autos clásicos” y “autos antiguos”. Los primeros deben tener una edad superior a los 50 años de fabricación y una historia sobre la importancia, exclusividad o singularidad de la marca que tienen una valoración o estudio mundial para catalogarlos de esa manera. Lo cual quiere decir que son pocos los autos considerados clásicos.
A su vez, “autos antiguos” son aquellos automotores que hayan cumplido 35 años y que conserven sus especificaciones y características originales de fábrica, presentación y funcionamiento. Estas definiciones las consagra el código de tránsito de Colombia y otras resoluciones del Ministerio de Transporte que le dan amplia consideración e importancia a estos vehículos. Esto incentiva a muchos propietarios que han tenido la gran “misericordia” de preservar de la mejor manera, la vida, el aspecto y el funcionamiento de estos autos.
Con el pasar de los años, la lógica conlleva a que el valor del auto usado caiga considerablemente comparado con el auto nuevo. La falta de tiempo y de disposición para enfrentar los “achaques”, mantenimiento y reparaciones que requiere un auto usado desestimula a muchos de conservarlos o adquirir uno. Prefieren someterse a la alta inversión económica y a compromisos financieros para “montar en nuevo”. Pero ya es posible que reciban su mérito y premio quienes han perseverado con el “viejito”.
En Colombia ya hemos incursionado en la alta valoración a este tipo de vehículos, los cuales cumpliendo con esos estándares de conservación y presentación lo más cercano a lo original, podrían representar una inversión para el propietario. El mercado del usado antiguo se ha vuelto dinámico y supone hacia futuro un importante nicho o sector para tener en cuenta. Los modelos 1982 hacia atrás, son los llamados a ser tenidos en cuenta. Si son de marcas extintas como Pontiac, Oldsmobile, Mercury, Plymouth, AMC, entre otras americanas; Simca, Pegaso, Yugo-Zastava, Talbot, Austin, Rover, Lancia y Wartburg, entre las más reconocidas europeas, tienen una mayor expectativa.
No olvidemos que las marcas aún vigentes crearon en el pasado modelos con alta reputación y demanda y que de ser encontrado ejemplares en excelente estado, tiene usted un posible tesoro de gran valor. Mercedes, Jaguar y BMW de los 70 empiezan a tener mayor estima de la muy alta que tuvieron en su tiempo. Skoda, Opel, Peugeot, Citroën, Seat,, Alfa Romeo ó Audi, de aquella época son marcas europeas que poco se vieron aquí, por lo cual aumentan su valor actual. Los Volkswagen siguen cotizándose, los japoneses también empiezan a tomar gran auge, sobre todo los camperos y deportivos. Los Fiat, Renault, Dodge y demás marcas ensambladas aquí tienen un mercado muy demandado.
Desde estas líneas motivamos a todos los propietarios y demás personas que tengan acceso a estas joyas a que continúen protegiendo este patrimonio de la ingeniería y de la industria, que finalmente nos pertenecen a todos los que amamos y apreciamos a los autos. Es poco probable hoy encontrar baúles, cuevas, guacas u otros tesoros escondidos, pero en el mundo globalizado y de rápido acceso en el cual hoy vivimos es posible buscar, obtener o conservar estos tesoros rodantes. Son los autos, clásicos y antiguos, los tesoros modernos.
ISAAC PEREIRA MÁRQUEZ