La cilindrada del carro ¿por qué es importante?

El primer dato que busca en las fichas técnicas de un vehículo el potencial comprador de un carro nuevo o usado es la cilindrada. ¿Es un 1.0, un 1.2, un 1.5, o quizá un 2.0, un 2.5 o incluso un 5.0? ¿Pero, qué significa esa cifra y qué importancia puede tener para definir la compra de un auto?

Cuando se habla de cilindrada en los carros, el concepto hace referencia a la capacidad volumétrica total que tienen los cilindros del motor para almacenar el combustible y recibir el aire que permite la mezcla, y que al ser comprimida en el cilindro explota bien sea por acción de la chispa que salta de las bujías o por la compresión que ejercen sobre esta mezcla los pistones en su carrera ascendente dentro del cilindro, si se trata de un vehículo diésel. En Colombia, esta cifra generalmente está descrita por las marcas en centímetros cúbicos, pero también se puede hablar de ella en litros.

El valor de la cilindrada con la que se registra un carro en su ficha técnica es una sencilla operación aritmética resultado de multiplicar la capacidad volumétrica de cada uno de los cilindros, por el número de cilindros totales que contempla el diseño del motor en cada vehículo en particular. Es así que si un carro 4 cilindros registra en su ficha técnica una cilindrada de 2.000 centímetros cúbicos quiere decir que cada uno de los cilindros tiene una capacidad para almacenar 500 centímetros cúbicos. Y esta capacidad individual de cada cilindro está dada por su diámetro y por la distancia que hay entre la parte inferior en dónde el pistón llega a su punto muerto inferior y el punto máximo superior de la carrera del pistón en el proceso de combustión.

¿Por qué es importante?

Hasta hace algunos años el dato de la cilindrada era fundamental al momento de elegir un carro porque permitía establecer por parte del comprador la capacidad de desempeño del auto y saber sí era el requerido para sus necesidades.

Un carro con un valor alto de cilindrada significaba que tenía una entrega de caballos y un desempeño de torque de cifras altas. Es decir que para vehículos que debían moverse sobre terrenos exigentes por su topografía, o de los que su propietario esperaba una buena entrega de velocidad era importante poder contar con vehículos de una cilindrada superior a los 2.0 litros, por ejemplo. En el caso de carros para un uso más urbano, e ir de un punto A a un punto B, sin mayores pretensiones o terrenos complejos, vehículos de 1.0 a 1.5 eran los más buscados.

Hoy día, con los desarrollos en la ingeniería automotriz y la fabricación de motores, esta relación ya no es tan directa. Gracias al surgimiento de apoyos para la admisión de aire en la mezcla a través de turbo compresores las marcas han desarrollado vehículos que con una cilindrada “pequeña”, es decir 1.0, 1.2 o 1.5 litros; pueden entregar potencias que en años anteriores solo eran posibles con motores de mayor cilindrada.

Pero aún los motores turbo no son tan masivos y es así como el dato de la cilindrada todavía puede ser una buena guía para que futuro comprador analice si ese carro en el que está interesado, y con esa cilindrada es el que suple sus necesidades de movilidad cotidiana.

Pero también ese valor es un indicador importante para establecer, por ejemplo, el pago de impuesto. Mientras mayor sea el rango de cilindrada más alta será la tarifa impositiva. Igualmente, este valor también determinará, el valor del SOAT que anualmente el propietario debe cancelar.

Y por supuesto la cilindrada será un indicador de consumo de combustible. Por lo general los vehículos de baja cilindrada no tienen más de cuatro cilindros, en tanto que vehículos con cilindradas mayores aumentan también sus cilindros y esto implica mayor consumo.

De igual manera, un carro con un número de cilindros pequeño (3-4) también implicará unos costos de mantenimiento y/o reparación menores, frente a un vehículo que tenga un mayor número de cilindros (6-8-10-12) y que generalmente están asociados a vehículos de gamas superiores.

Por eso, y aunque no es la última palabra, ni el único factor que debe decidir la compra de un carro, la cilindrada es una cifra que todo comprador debe tener en cuenta y analizar sus ventajas y desventajas como paso previo a tomar la decisión sobre que auto estará en su garaje.