Pintura automotriz y sus tipos de aplicación.

No es solo apariencia o estética. Es también protección. La pintura automotriz ha evolucionado a lo largo de la historia de esta industria, desde el simple barniz que se utilizaba en carruajes primero y luego en los primeros autos, hasta los más elaborados componentes actuales que permiten una gran cantidad de opciones y posibilidades para darle una muy buena apariencia a los vehículos.

Al hablar del tipo de pintura en los vehículos básicamente esta se clasifica de acuerdo con el proceso de aplicación que se haya utilizado Y también dependiendo de ese mismo proceso la pintura o recubrimiento del vehículo puede tener un tratamiento especial que le da al carro una apariencia mucho más elaborada.

El proceso de aplicación de la pintura se divide en tres tipos.

Pintura monocapa: es el procedimiento más simple y también el más económico, aunque actualmente es usado básicamente para la pintura de vehículos de trabajo y poco menos en los vehículos de pasajeros.

En este sistema la pintura monocapa se mezcla con el catalizador y se diluye. Así, en un mismo proceso es posible aplicar tanto el color como la protección a la pintura y no es necesaria la aplicación de barniz para darle brillo a la pintura, de ahí lo económico del procedimiento.

Sin embargo tiene inconvenientes, como una menor resistencia química, una limitada paleta de colores y la imposibilidad de poder aplicar efectos especiales que le den mayor realce a la estética del vehículo.

Pintura bicapa: este método de aplicación de la pintura automotriz es el más popular en los vehículos de pasajeros y se utiliza para casi todos los segmentos por su versatilidad.

En este proceso la aplicación de la pintura se hace en dos capas. La primera de ellas es llamada la base color, y es la que proporciona el color y los efectos especiales que se pueden desarrollar con este sistema para darle más relevancia y destacar más el vehículo.

La segunda capa es el barniz o laca y que cumple con la tarea de dar protección y brillo al color. Con el proceso de aplicación bicapa se puede dar a la pintura un acabado bien sea de color sólido o también aplicar efectos de pintura metalizada o perlada.

Pintura tricapa: para este sistema de aplicación los técnicos de pintura de las firmas automotrices trabajan con tres capas para darle al automotor el acabado  y la paleta cromática seleccionada como parte de su estrategia de posicionamiento y venta en el mercado global de vehículos.

La primera es una capa del color base elegido. La segunda capa de aplicación es color translucido que permite el paso de luz para crear un efecto visual En esta capa se incorporan los elementos que le pueden dar a la pintura una apariencia metálica con la adición de micropartículas de un metal como aluminio, por ejemplo, y que le dan un efecto de brillo y profundidad a la lámina del automotor. O el efecto de pintura nacarada que se caracteriza  por los diferentes visos que pueden verse en la lámina dependiendo del ángulo del observador y como se refleja desde ese ángulo la luz que pega sobre la superficie del automotor. Y la tercera capa esta compuesta por el barniz o laca para darle el brillo y la protección necesaria.

Es importante que al momento de realizar una intervención preventiva o correctiva sobre la pintura de su vehículo acuda un sitio especializado en el que puedan determinar el tipo de proceso de aplicación y acabado, con el objetivo de poder adelantar los trabajos de intervención con la técnica y los elementos y herramientas adecuadas y no generar afectaciones que deterioren este recubrimiento.